La conocida como Casa de Indalecio Gómez, fue propiedad de la familia Gómez, los legítimos descendientes del Primer Encomendero de la Hacienda de Molinos: Diego Diez Gómez desde la primera mitad del siglo XVIII. Esta Casa estuvo en manos de esa familia hasta principios del siglo XX, luego fue cedida a la Policía, y fue afortunadamente recuperada y restaurada por Dirección de Patrimonio Cultural de la Provincia de Salta a comienzos del presente siglo.
En el año 2008 el Gobierno de la Provincia de Salta, la Fundación Naturaleza para el Futuro, Mitsubishi Corporation y el Municipio de Molinos, se unen para llevar adelante el proyecto del mencionado centro de interpretación a fin de enseñar y relacionar al visitante intelectual y sensible con el patrimonio natural y cultural del pueblo de Molinos.
Objetivos:
Se logró con oficio e ingenio montar una sala para niños que con replicas que logran crear un interés singular en los pequeños en la arqueología, las manifestaciones plásticas y la naturaleza de Molinos. Otras de la salas se dotó de equipos multimedia, a fin de que la misma sirviera para cursos, conferencias y capacitaciones. Se acondicionó de manera sumamente atractiva el zaguán de ingresos y una sala de informes turísticos, panelería, auspicios y exposición de productos y artesanías de Molinos. En el gran patio central se construyó un piso que, con maestría consiguió armónicamente plasmar una serpiente arqueológica, símbolo de la tierra para las culturas ancestrales del territorio calchaquí, además se hizo una tarima escenario para espectáculos y reuniones. Las galerías se conservaron intactas con su sencillo y singular atractivo.
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